“En
cuanto a los supuestos de la relación psicología y pedagogía se pueden
mencionar” (Nassif, 1967):
- La
pedagogía es una disciplina autónoma con campo y enfoque propios, que se
ubica en el sector de las ciencias llamadas
"espirituales", "culturales" o, para usar una
terminología menos comprometida, de las "ciencias humanas" no
naturales.
- La
psicología es también una disciplina autónoma con un visible mayor
desarrollo que la ciencia pedagógica, especialmente en el terreno
metodológico.
- Las
ciencias humanas se caracterizan hoy por sus permanentes
estrecruzamientos, por un servicio mutuo, que de ningún modo hace peligrar
la autonomía de cada una de ellas, siendo el "criterio de los
intereses" o el de la dirección de la investigación el más adecuado
para circunscribir los propósitos y los dominios particulares.
Nassif
(1967) a su vez menciona “algunos principios, capaces de regular la aplicación
de la psicología a la teoría y a la práctica de
la educación”, entre ellos:
- La
aplicación de la psicología a la pedagogía no puede hacerse en perjuicio
de la autonomía de esta última.
- El
criterio que debe regir esa aplicación ha de ser pedagógico, cuando
del interés educacional se trate (en la práctica este principio se
traduce cuando el psicólogo asiste al maestro en la tarea educadora,
sin perjuicio de que el maestro pueda asistir al psicólogo cuando se
trate de la investigación psicológica pura)
- El
conocimiento psicológico se utilizará en educación como un
elemento científico más para la comprensión del complejo educacional.
- Desde
el punto de vista de una pedagogía autónoma, el campo pedagógico
se presenta como mucho más amplio que el psicológico, y necesita
fundar su coherencia en la comprensión de la totalidad de los
factores de la educación, aparte de los meramente psicológicos.
Nassif (1967) expresa además que
es indudable que la psicología pedagógica se
apoya en el conocimiento psicológico y en su metodología básica. Pero el
interés o la dirección que determina su constitución no es psicológico, sino
pedagógico. De lo contrario sería psicología y nada más. En tanto la pedagogía
asimile los conocimientos- psicológicos con intención educativa, estos conocimientos
pasan a ser ciudadanos de su mundo.
Como conclusión,
Nassif (1967) afirma que “nada más que en el equilibrio de las ciencias
humanas, un equilibrio que además sea estrecha cooperación entre sus
cultivadores, puede crecer una más perfecta comprensión del hombre que es su
sujeto y su objeto”.
Fuente: Nassif, R. (1967) Sobre la relación de la psicología con la
pedagogía. Revista de Psicología, vol.4 [Documento de PDF]